Título: Colores
Autora: Victoria Finlay
Reseña hecha por : Alicia Ortego @Alisetter
¿Alguna vez os habéis preguntado de dónde proceden los colores? Sí, los colores… esos que tiñen nuestras ropas, objetos, muebles, incluso alimentos.
“¿Qué cosa es morada en la tierra, roja en el mercado y amarilla en la mesa?”
Este es un libro que nos habla de eso, del origen de los colores, y de mucho más. A través de varios viajes a lo largo y ancho de este mundo, empezando con el ocre en Australia, y pasando por México (rojo), Afganistán (azul ultramar), Irán y España (amarillo), Italia… Victoria Finlay nos va contando de dónde proceden los colores, de cómo estos han provocado pasiones, codicias, incluso conflictos internacionales por su valor en el comercio de diversas mercancías.
Y todo ello revisando la Historia con los Colores como centro de atención, porque efectivamente lo tuvieron. Como la desesperación de Europa por conocer de dónde procedía el color rojo con el que comerciaban los españoles, traído de América, utilizado tanto para el colorete de maquillaje de las mujeres, como para los tejidos, y con la mejor capacidad de fijación… llegaron a enviar espías para averiguarlo. Se trataba de la cochinilla, un insecto que vive y se alimenta de las chumberas, allá en México.
La mayoría de las historias y anécdotas que aquí se cuentan, a propósito de cada color, y de cada lugar que visita en su busca, ocurrieron a finales del siglo XIX. Fue en esa época, según ella misma relata en la introducción, cuando ocurrieron más cosas relativas al color: en arte, música, ciencia, salud, psicología, moda… Esos años en que despegaba y se consolidaba la Revolución Industrial, y la sociedad de consumo.
Victoria Finlay es una antropóloga social inglesa, y especializada en cultura oriental, aunque después pasó a ejercer de periodista y escritora freelance en periódicos y revistas de todo el mundo.Y se nota ese interés y saber por el trabajo de campo y la Antropología, ya que estos viajes los ha realizado ella. En su relato y análisis no es ajena a los lugares y sobre todo las personas con las que se relaciona en esa búsqueda del origen de cada color.
“Cuando entré por primera vez en la catedral de Chartres… recuerdo la sensación de unas luces azules y rojas que bailaban sobre las piedras blancas. Y recuerdo que mi padre me tomó de la mano y me contó que el vidrio de colores se había creado hacía casi ochocientos años, “y hoy no sabemos cómo hacer ese azul”. Yo tenía ocho años … Y más o menos por entonces decidí que averiguaría ‘lo de los colores’… (desde entonces) cada vez que oía anécdotas sobre los colores –un arquéologo que explicaba cómo los chinos dependieron de Persia para el azul de su famosa porcelana Ming; el sorprendente descubrimiento de que, en tiempos, los pintores ingleses embadurnaban sus lienzos con personas muertas; los pintores de Hanoi que comentaban lo que había cambiado su trabajo no solo porque no tuvieran cosas nuevas que decir a medida que Vietnam se abría, sino simplemente porque disponían de pinturas mejores y de colores más vivos- aquellos recuerdos infantiles despertaban”.
No logro quitarme de la cabeza este libro cuando he visto, por ejemplo en Kashgar (China), a los vendedores de tintes en los mercados al aire libre. Cajones llenos de minerales pulverizados como el lapislázuli –quizá traído de las minas de Afganistán que visitó Victoria, aún activas-. O cuando en Etiopía los jóvenes Hamer se preparaban para una fiesta pintándose el rostro, haciendo los colores allí mismo, con yesos machacados y mezclados con grasa animal (y nos permitieron verlo por ser turistas, pero en realidad era un rito a escondidas del resto de la tribu).
Detalles que quizá se nos escapan entre tantos inputs de información que uno tiene cuando viaja por países desconocidos… o no. Quizá con este libro, un poco menos 😉
Gracias, Ivan! Es dificil encontrar palabras para hablar de colores, tan grandes son, tan evocadores… 🙂
Si, el Holi tiene que ser toda una experiencia!
Preciso post United Colours of LIFE 😉
El holi en India es espectacular, un universo de colores y VIDA en estado puro 😉
Sí…. en India el color está muy muy presente. Recuerdo cuando volví del último viaje, India del Sur, y al llegar a casa pensé «uf, qué soso, qué gris, qué desvaído…», y no es tanto, pero en ese momento el contraste fue brutal y eché de menos el color de allí. También en el mercado de Mysore, por ejemplo, vendían esos polvos de colores, aunque el origen natural no lo tengo tan claro en esos casos.
Gracias por esta nueva referencia, me la apunto! 🙂
O en India, con todos esos montones de polvo de diferentes colores que venden en puestos callejeros de Pushkar o Varanasi. Nunca llegué a estar en el Holi, pero me habría encantado enzarzarme en una guerra de polvos de colores con los hindúes…
Este es otro libro muy util para los fotógrafos y las diferentes asociaciones mentales que se producen con cada color:
http://www.casadellibro.com/libro-psicologia-del-color-como-actuan-los-colores-sobre-los-sentimien-tos-y-la-razon/2900001019695
🙂