Título: Esta noche la libertad
Autores: Larry Collins y Dominique Lapierre
Reseña hecha por : Eduardo de Winter @infoviajero
Para el viajero, la narrativa histórica suele ser un alma gemela que ilumina sus pasos, cual guía que nos descubre los secretos de una obra maestra mas allá de lo meramente aparente. El viajero camina no por recorrer kilómetros, sino por discernir los senderos, aprender de las pisadas que otros dejaron y quizá así saber dirigir las propias. La avidez del objetivo de su cámara no busca coleccionar postales; inmortaliza sensaciones y sentimientos, fotografía para captar las esencias de las almas que parecen gritar a través de las miradas. Cuando el destino es distante, la cultura nos es ajena y sus gentes desconocidas, la literatura histórica, nos acerca, nos enseña, nos permite al pisar aquellas tierras no solo mirar, sino comprender.
Había viajado a India, soñaba con regresar, aunque gran parte de la idiosincrasia de aquel universo me era ajena. Hasta que lo leí y comencé a descubrir las raíces, el nacimiento, el dolor, la vida y las sonrisas de un país tan mágico como enigmático. “Esta noche la libertad” de Dominique Lapierre y Larry Collins, permite eso y mucho más al lector que busca la India real, aquella que solo se comprende a partir de su pasado, a través de su nacimiento. Se trata de una obra fruto de un inaudito esfuerzo investigador caracterizado por el rigor, cuatro años de trabajo, 250.000 kilómetros recorridos, cientos de entrevistas y decenas de referencias bibliográficas. Estamos por tanto, ante una obra esencial para captar el espíritu de India.
La narración arranca en 1.947 cuando Lord Mountbatten recibe la comisión de gestionar el proceso de independencia de India. No es una tarea sencilla. Habrá de enfrentarse a la oposición de parte de la clase política inglesa, renuente a renunciar al estatus del Reino Unido como impero mundial, y mas aún a perder a la joya de la Corona. Destacaría entre ellos Winston Churchill, pieza clave de la partida diplomática. A través de sus capítulos Lapierre y Collins recuerdan la trayectoria colonial de Inglaterra, esencial para comprender la situación tan compleja que se vivió a finales de los años cuarenta del pasado siglo.
“La única herencia de los colonizadores británicos parecía ser una abrumadora colección de problemas y de maldiciones. Sin embargo, nadie en el recinto del Parlamento indio parecía alimentar esta noche la más mínima animosidad hacia ellos, todos parecían pensar que la marcha de los dueños de la India bastaría para aliviar el peso de los terribles males que anegaban el país.”
Uno de los personajes claves de la obra es Gandhi. Nos descubren los autores, no solo al personaje sino a la persona, con sus ambiciones, sus principios, sus contradicciones y especialmente su desasosiego por una paz que se antoja improbable. Mientras el proceso descolonizador trata de dirigir los pasos de la nueva nación que había de nacer, las tensiones entre los diferentes grupos religiosos crecen y se producen los primeros conatos de violencia. La perspectiva de un devastador brote de ira entre hindúes, musulmanes y sijs, desvela a Gandhi, a quien seguiremos en sus peregrinaciones tratando de evitarlo.
“No percibo ninguna luz en la impenetrable noche. Los principios de verdad, de amor y de no violencia que me han sostenido durante cincuenta años parecen desprovistos de las cualidades que yo les había a tribuido.”
Entre los musulmanes emerge un líder ambicioso, Jinnah, cegado en su empeño por crear un estado independiente musulmán, idea a partir de la cual y pese de los esfuerzos ingleses por conservar la unidad territorial de India acaba surgiendo Pakistán. Sin embargo, los hindúes y musulmanes vivían distribuidos por los vastos territorios de los diferentes estados indios, por lo que se hizo irremediable un histórico proceso de migración para millones de personas, de éxodo para muchos de ellos, a fin de trasladar a los musulmanes a Pakistán y a los hindúes a las nuevas fronteras de India, aunque ello implicase arrancarlos de sus raíces, sus tierras y sus posesiones. Este suceso marcaría durante décadas las relaciones entre ambos países y sus comunidades religiosas, puesto que se desató una ola de irracional de extrema violencia, contándose los muertos por decenas de miles, incapaces las autoridades de frenar un odio religioso excusado en rencillas y afrentas del pasado que exigían cumplida venganza.
Lord Mountbatten -quien años mas tarde moriría victima de un atentado del IRA- se revela como un personaje sumamente implicado en el futuro de India y Pakistán, fruto de una empatía poco usual en los lideres de la metrópoli que abandonaban a las colonias a su amparo. Gran parte de sus anhelos, su trabajo y sus desdichas las comparte con Jawaharlal Nerhu, a la postre Primer Ministro indio tras la independencia y encargado de pronunciar unas palabras claves en la historia india:
«Hace muchos años, establecimos una cita con el destino, y ha llegado el momento de cumplir nuestra promesa… A media noche, cuando los hombres duerman, la India despertará a la vida y a la libertad».
La parte final de “Esta noche la libertad” se centra en el asesinato de Gandhi. Se nos presenta a sus autores, se revelan sus planes, se descubre a sus cómplices y se narra la muerte del gran líder indio hasta el punto de poder sentirla. Se recogen las confesiones de los asesinos y explica que fue de ellos tras el magnicidio. El proceso de independencia llegó a su último acto cuando Lord Mountbatten abandonó India y vio alejarse el puerto de Mumbai y su monumental Puerta de la India. Algo había cambiado en nuestro mundo.
“Una época finalizaba ante esa Puerta de la India, otra época comenzaba, la que Gandhi había inaugurado para las tres cuartas partes del planeta, la Era de la descolonización. Los últimos representantes de la raza de capitanes y soberanos reales abandonaban el continente indio; la ligera brisa que impulsaba sus chalupas anunciaba los huracanes que muy pronto habían de barrer los mapas del mundo. En los años futuros, serían numerosos los puertos que presenciarían una ceremonia semejante a la de este 28 de febrero de 1948 en Bombay”.
Como en todas la obras de la factoria Lapierre-Collins la narración resulta fuida, suave y agradable para el lector, para quien las páginas van pasando casi sin notarlo, deseoso de continuar una lectura que atrapa.“Esta noche la libertad” es una obra imprescindible para aquellos que desean viajar a India, quienes desean comprender su magia y sus contradicciones. Una vez mas la narrativa histórica nos desvela el porqué de una realidad que se oculta entre imágenes de pobreza y egos de modernidad. Un retrato del pasado para observar el presente.
La primera vez que me acerqué a la figura de Mahatma Ghandi fue a los 17 años a través de un libro de Dominique Lapierre y Larry Collins que se titulaba «ESTA NOCHE LA LIBERTAD». Me impresionó tanto que cambió mi vida y me hizo comprender que en el siglo de las guerras más devastadoras que había habido sobre la Tierra, también se había descubierto y activado un camino que podía traer esperanza para los seres humanos y un futuro radicalmente distinto, justo y esperanzador para nuestro mundo.
es uno de los mejores libros que he leido me gusto mucho ojala agan otro igual
Es uno de los mejores libros que he leído. Tan bueno que me costaría intentar hacer una reseña sin caer en la adulación. Enhorabuena por la suya.
Hola María, en la web de iberlibro sueles tener muchos libros descatalogados. Un saludo
Lo leì hace mucho y querìa conseguirlo,està agotado donde puedo obtenerlo? gracias
Excelente reseña, te felicito. Me servirá. Los libros de Lapierre, que he leído, son muy interesantes.
Raquel
Muchas gracias por tu comentario Iván. Me alegro de que te haya gustado la reseña. El libro es fantástico, La Ciudad de la Alegría también me encantó aunque Esta noche la libertad me ayudó a comprender mejor el país. Un saludo
Gran reseña sobre un lugar fascinante y tan contradictorio como India. Un país que no deja indiferente a nadie. Hace años que leí » La Ciudad de la alegría» , un libro que me encantó. Lo pongo en la lista, gracias por compartir 😉