Título: Las Ciudades Invisibles
Autor: Italo Calvino
Reseña hecha por : Carlos Olmo @vagamundo
Marco Polo (c. 1254-1324) tenía 17 años cuando su padre, mercader veneciano, lo llevó en un viaje que ningún europeo había hecho antes, desde Acre (Israel) hasta Shangdu (Shang-tu), China, donde llegaron en 1275, un viaje que forjó la personalidad del personaje legendario pero real que fue Marco Polo.
Atravesaron Irán, cruzaron Pamir, llegaron a Sinkiang, en China, y finalmente cruzaron el desierto de Gobi y llegaron a la corte del emperador Kublai Jan.
Marco Polo entró en el cuerpo diplomático de Kublai Jan, y fue durante tres años gobernador de la ciudad china de Yangzhou. Todo esto con veintipocos años.
Su obra Los viajes de Marco Polo, también conocida como El libro de las Maravillas, es quizás el libro de viaje más influyente de toda la historia. Se puede leer en versión gratuita en Cervantes Virtual.
Italo Calvino, un autor que me fascina desde siempre, hace de este encuentro entre Marco Polo y Kublai Jan un libro inclasificable, que no es ni novela ni libro de relatos de viaje, sino la narración en persona de Marco Polo a Kublai sobre unas cincuenta ciudades imaginarias, todas con nombre de mujer.
Italo Calvino es el maestro de la literatura combinatoria, donde el universo lingüístico ha suplantado a la realidad y se concibe la escritura como un mecanismo que juega con las posibles combinaciones de las palabras.
La estructura del libro es la siguiente:
– Nota preliminar, donde el autor explica la obra y sus objetivos, y los métodos de escritura utilizados. En realidad es el texto de una conferencia que dio en 1983, 11 años después de la edición del libro, que ha sido incluída en ediciones posteriores.
– Nueve partes, compuesta cada una de ellas por capítulos cortos, dedicados a una ciudad. Los capítulos siempre se inician con «Las ciudades» (Las ciudades y el deseo, la ciudades y la memoria, las ciudades sutiles; las ciudades escondidas).
Es un libro que no llega a las 200 páginas, algunas ciudades se describen en pocas líneas, pero no por ello se queda corto; tiene lecturas a varios niveles, de hecho mi segunda lectura para escribir la reseña, 11 años después de la primera, la he disfrutado incluso más.
Por suerte, Italo Calvino no es de esos autores insufribles que disfrutan escribiendo obras crípticas que nadie entiende; todo lo contrario, él busca la complicidad de los lectores y por ello no tiene problemas en explicar la obra en su nota preliminar:
«En Las Ciudades Invisibles no se encuentran ciudades reconocibles. Son todas inventadas; he dado a cada una un nombre mujer; el libro consta de capítulos breves, cada uno de los cuales debería de servir de punto de partida de una reflexión válida para cualquier ciudad o para la ciudad en general.»
Las Ciudades Invisibles es creación en estado puro, con una gran carga simbólica, un libro para ser interpretado de diversas maneras. Marco y Kublai hablan del simbolismo en el libro:
Pero por manifiesto u oscuro que fuese, todo lo que Marco mostraba tenía el poder de los emblemas, que una vez vistos no se pueden olvidar ni confundir. En la mente del Jan el imperio se reflejaba en un desierto de datos frágiles e intercambiables como granos de arena de los cuales emergían para cada ciudad y cada provincia las figuras evocadas por los logogrifos del veneciano.. (…)
-El día que conozca todos los emblemas -preguntó a Marco- ¿conseguiré al fin poseer mi imperio?
Y el veneciado: -Sire, no lo creas: ese día serás tú mismo emblema entre los emblemas.
Una ciudad microscópica que va ensanchándose y termina formada por muchas ciudades concéntricas en expansión, una ciudad telaraña suspendida sobre un abismo, una ciudad bidimensional como Moriana, y Laudomia, la ciudad de los muertos, forman un ramillete de creaciones de la desbordante imaginación de Italo Calvino puestas en boca de Marco Polo.
Hay críticos que han visto en Las Ciudades Invisibles una especie de reescritura del Libro de las maravillas de Marco Polo; yo lo veo más como un ejercicio de libertad literaria donde se juntan la poesia, el ensayo, el relato de viajes para presentarnos, de manera simbólica y conceptual, principios morales, sociales y de relaciones entre humanos, en los que cada uno de nosotros es su propia ciudad y te puedes identificar con alguna de las que Italo describe de manera tan imaginativa.
Así describe Calvino la ciudad Zoe : En cada lugar de esta ciudad se podría sucesivamente dormir, fabricar arneses, cocinar, acumular monedas de oro, desvestirse, reinar, vender, interrogar oráculos. Cualquier techo piramidal podría cubrir tanto el lazareto de los leprosos como las termas de las odaliscas. El viajero da vueltas y vueltas y no tiene sino dudas: como no consigue distinguir los puntos de la ciudad, aun los puntos que están claros en su mente se le mezclan. Deduce esto: si la existencia en todos sus momentos es toda ella misma, la ciudad de Zoe es el lugar de la existencia indivisible. ¿Pero por qué, entonces, la ciudad? ¿Que línea separa el dentro del fuera, el estruendo de las ruedas del aullido de los lobos?.
Este libro es como Zora, «ciudad que quien la ha visto una vez, no puede olvidarla más»; supongo que lo mismo le pasó a Javier Díez, creador del fenecido, por desgracia, programa de Radio 3 de RNE, La ciudad invisible, uno de mis favoritos.
Las ciudades invisibles de Calvino y Los papeles salvajes de la uruguaya Marosa di Giorgio. Ambos. Los verdaderos premios nobeles
Italo Calvino es un autor enorme y su sentido del humor excepcional
Creo que pocas veces me lo he pasado tan bien leyendo como con “el barón rampante”, «el caballero inexistente» y «el vizconde demediado», son obras maestras del humor y la ironía, con diversos niveles de lectura también, sociales y políticos.
Italo Calvino, desde que leí «el barón rampante», es uno de mis escritores favoritos. Este aún no lo he leido, pero gracias a la reseña, cae seguro…. 🙂
Que buena pinta! Tambien me lo apunto, gracias Carlos! 🙂
Gran reseña Carlos. Es un libro que he tenido un par de veces en la manos al ir a la biblioteca pero que no me decidí a sacarlo. Lo pongo en la lista TOP de pendientes 😉